Conil de la Frontera
Como próspera ciudad pesquera, ya desde la Antigüedad se constata la presencia de fenicios, romanos y visigodos. Aunque, sin duda, el turismo de sol y playa conforma su principal oferta turística, Conil de la Frontera tiene un pequeño y bello casco antiguo, además de una amplia oferta gastronómica y de ocio donde la fiesta se alarga hasta altas horas de la madrugada.
Por esa razón, te invitamos a conocer los misterios que encierra ya que perderse entre sus calles forma parte también de ese descubrimiento personal de entender su historia y legado cultural. Os facilitamos algunas sugerencias que, a buen seguro, nos os dejarán indiferentes.
Torre de Guzmán
Esta torre vigía del siglo XIV es un claro ejemplo de la importancia que tenía, desde lo alto, obtener una mejor visión del tránsito de embarcaciones por la costa y la vigilancia de la milenaria pesca de almadraba. Por otro lado, es relevante como elemento de fortificación y defensa contra posibles ataques por mar.
Os animamos a subir a sus almenas con cámara en mano donde tendréis unas vistas impresionantes de toda la costa y del pueblo, especialmente al atardecer, donde la luz ya se difumina y toma un color especial, único, que seguro os dejará un recuerdo imborrable en vuestra memoria.
Puerta de la Villa
Desde el Hotel Tres Jotas y bajando en dirección al centro del pueblo, a escasos metros, encontrarás la Puerta de la Villa, uno de los accesos principales al antiguo recinto amurallado de Conil.
Construida en 1502, actualmente es lugar de encuentro y desde la puerta es habitual ver personas que suben y bajan a su centro histórico.
La Puerta de la Villa es considerada Bien de Interés Cultural desde 1985.
El Baluarte
De arquitectura similar a la Puerta de la Villa, en este lugar se colocaban en sus esquinas unos cubos o contrafuertes que servían como puntos estratégicos de vigilancia. Como elemento defensivo de la muralla medieval, de ellos asomaban las piezas de artillería para defender a la ciudad de cualquier ataque enemigo.
También es destacable que, concretamente en esta ubicación, comenzaba el camino que a través de la costa llegaba a Cádiz, de ahí el nombre de “Puerta de Cai”.
Antiguo Convento de la Victoria
Fundada en 1567 por los franciscanos bajo el mandato del Duque de Medina Sidonia, se construyó para rendir culto a la patrona de la villa, Nuestra Señora de las Virtudes.
A finales del siglo XV se levantó la actual iglesia.
En su interior se encuentran tallas de gran valor. Actualmente, el Ayuntamiento de Conil ocupa el claustro y las dependencias de este antiguo convento.
Capilla del Espíritu Santo
Ubicada en el Barrio de los Pescadores, próxima al mar, fue fundada en 1586 por la nobleza. En esta capilla se da culto a la Virgen del Carmen, patrona de los Pescadores y Marineros, de ahí que sea tan especialmente venerada por la gente del mar.
Barrio de los Pescadores
Sin duda uno de los barrios más típicos de Conil, de callejuelas estrechas, flores y singulares rincones.
Lugar de obligada visita para conocer las raíces de este pueblo marinero y en cuyas calles aparecen el nombre de los peces que se hallan en su litoral.
Puerto de Conil
Si quieres entrar aún más en contacto con la tradición marinera, te invitamos a visitar su puerto pesquero situado junto al Faro de Roche.
La pesca predominante en Conil es artesanal y goza de denominación de origen por lo que te animamos a ver, aparte de las embarcaciones, algunas de sus subastas en la lonja que se realizan entre las 12.00 y 17.00 horas.
La Chanca de Conil
La existencia de la Chanca de Conil se debe a la captura del afamado y codiciado atún rojo que todos los años se pesca en las almadrabas de Barbate, Tarifa, Zahara de los Atunes y Conil.
Junto a las labores de despiece y salado del atún, la Chanca cuenta con salas de exposiciones y el Museo del Atún.
Además, sobre el mes de mayo y en relación con esta actividad, se realizan unas jornadas gastronómicas y un festival de música que atraen a miles de visitantes.